Las imágenes del telescopio espacial Hubble han facilitado nueva información sobre las órbitas, formas y tamaños de los pequeños satélites de Plutón. Así se ha podido conocer la relación entre las órbitas de Estigia, Nix e Hidra, además de confirmar la oscuridad de Cerbero. Los técnicos de la NASA usarán estos descubrimientos para planificar mejor el vuelo de New Horizons, la primera nave espacial que se aproximará en julio a estos remotos objetos del sistema solar.
Estigia, Nix, Cerbero e Hidra, las cuatro pequeñas lunas que orbitan alrededor del planeta enano Plutón muestran características inusuales. Así lo refleja el estudio que los investigadores Marcos Showalter del Instituto SETI y Douglas Hamilton de la Universidad de Maryland (EE UU) publican esta semana en la revista Nature.
“Estas cuatro lunas siguen una órbita casi circular y casi ecuatorial alrededor del ‘planeta binario’ integrado por Plutón y su gran luna Caronte”, apuntan los autores en su estudio, aunque destacan un fenómeno curioso: la resonancia orbital entre tres de las lunas.
En concreto, las observaciones sugieren que las órbitas de Estigia, Nix e Hidra están ligadas mediante una resonancia (donde algunos periodos orbitales son fracción de otros) de tres cuerpos, que recuerda a la denominada ‘resonancia de Laplace’ que existe entre las lunas de Ganímedes, Europa e Ío del planeta Júpiter.
Las órbitas de las lunas Estigia, Nix e Hidra están ligadas mediante una resonancia triple
Entre los satélites de este gigante gaseoso se establece una resonancia de tipo 1:2:4, es decir, por cada vuelta de Ganímedes alrededor de Júpiter, Europa da dos, y por cada vuelta de esta, Ío da otras dos. En el caso de las tres lunas de Plutón parece ocurrir algo parecido, “pero perturbaciones de otros cuerpos inyectan caos en una configuración que de otra manera sería estable”, explican Showalter y Hamilton.
Otros datos que aporta el estudio son los valores diferentes de luminosidad que presentan los satélites de Plutón. Así, las superficies de Hidra y Nix –que también se ha observado rotan de forma caótica por la torsión que ejerce el ‘planeta binario’– son bastante brillantes como ocurre en Caronte. Sin embargo, Cerbero es mucho más oscuro. Esto plantea interrogantes acerca de cómo pudo haberse formado este sistema satelital tan heterogéneo.
Inminente llegada de New Horizons
Algunas de las respuestas las podría facilitar la nave espacial New Horizons de la NASA, que el próximo 14 de julio de 2015 volará cerca de Plutón. Los responsables de esta misión, la primera a esta región tan remota del sistema solar, tendrán en cuenta los resultados del estudio, que también puede ayudar a comprender otros sistemas similares en el universo.
De hecho, en el mismo número de Nature aparece otro artículo del astrónomo Scott J. Kenyon del Smithsonian Astrophysical Observatory (EE UU) donde se señala que la arquitectura orbital de los satélites de Plutón-Caronte se asemeja a la de otras lunas de exoplanetas descubiertos por el observatorio espacial Kepler, como en los sistemas Kepler 730 y Kepler 2179.
Fuente: SINC